Para no caer en el olvido
Vino de rezos, de recién abordado el día, la boca es tan fresca como burbujas efervescentes. Fresas maduras y grosellas, con esa incesante medio aguja provocativa, equilibrio y firmeza con toque frutal al final. Excelente. Así era el maceración carbónica 2005 de Viña Norte.Hay algunos amigos que me critican por mi pasión por los vinos de maceración carbónica, los entiendo pero no los comprendo, en definitiva, peor para ellos porque no saben lo que se pierden.
Desde 1992 en que se creó, Bodegas Insulares de Tenerife ha ido acaparando premios, y no solo en las islas, sino internacionales y de reconocido prestigio. No voy a aburrirles con toda una relación, pero si decirles que han sido unos cuantos, destacando la Gran Medalla de Oro al Viña Norte Tinto Maceración Carbónica 2002.
En su elaboración cuenta con las variedades canarias Listán Negro (95%) y Negramoll (5%). Y se elabora encubando los racimos enteros en un depósito cerrado, con ausencia total de aire, durante un periodo comprendido entre seis y ocho días, al cabo de los cuales se prensan suavemente.
De los 170 viticultores que formaban la parrilla de salida en el 92 hoy ya pasan de los 700 y parece ser que cada vez con mayor entusiasmo. Al frente de todo el cuadro profesional como Director Gerente y en la bodega como enólogo, junto con Francisco Calixto, se encuentra Felipe Blanco Pinilla, un autentico entusiasta y hacedor de grandes vinos, al que tuve el placer de conocer en su época de Lanzarote y posteriormente en Tenerife cuando nos brindó el apoyo de la bodega para la realización de unos cursos de gastronomía y enología para profesionales.
Ya se que existen otras D.O y bodegas en todas nuestras islas y a su debido tiempo iré comentándolas, pero si por alguna había que empezar, tenia que ser por la más reconocida internacionalmente, y esa es Bodegas Insulares de Tenerife.
No hay comentarios:
Publicar un comentario